viernes, 2 de mayo de 2014






Solo en mi cuarto. Me acuesto en la cama y de la nada, así, de pronto, mi corazón derriba mis costillas y sale de mi pecho para escapar. Sin importar qué tan cerca estoy de capturarlo, mi corazón siempre logra escapar...

A todos se nos sale, duele un rato, pero más duele volver a encontrarlo.

Salgo a la calle gris. Y es frente a su puerta donde lo encuentro. Seco y arrugado. Frío y tieso. No lloro; imposible llorar sin corazón.

"No te vayas, corazón, prefiero tu abismo a un vacío invisible."

Estoy en un cuarto, mi cuarto. Nada se mueve, todo está en silencio. Mi cuarto me oculta de Ella.



C. C.